Carrera contra reloj. ¡BIM está aquí!

06.11.2017

La carrera está en marcha. Cada vez queda menos para esa deseada fecha donde todos los proyectos de obra civil deban realizarse en BIM y con ello, las empresas andan a marchas forzadas su ardua tarea de implementar en sus empresas esta metodología de trabajo, que interoperabilice y una muchas disciplinas.

Esto se extenderá a lo largo de toda la cadena que compone una obra civil, desde el que suministra, pasando por el mayor contratista hasta el proveedor más pequeño, pero el cambio no llegará hasta que el sector conozca todas las ventajas que este nuevo modelo de trabajo supone. El cambio será lento.

Un modelo BIM de construcción contiene no solo el diseño de un edificio, sino también datos sobre las propiedades de sus componentes, su construcción, el mantenimiento de la misma, las referencias unitarias de cada componente y un sin fin de información que enriquecerán cuantitativamente la obra. La base de datos y la forma en que se comparta la información son tan importantes como el modelo en sí, lo que significa que BIM no solo significa un cambio tecnológico importante, sino una revisión de todo el proceso de diseño. El hecho de pensar que un sistema que modela obra civil, en vez de un sistema que representa una obra civil, supondrá un cambio significativo en el sector, más incluso que la transición de los modelos en papel a los realizados a ordenador hace más de 20 años. 

Cierto es, que España no es pionera en este campo y está un poco verde en cuanto a legislación y normativa a seguir, pero no se queda atrás. El objetivo del gobierno es ambicioso, pero reconoce que hay varias etapas por el camino. Quedan definidas tres niveles de BIM, basados no solo en el nivel de tecnología utilizado para diseñar un edificio, sino que también en el nivel de colaboración dentro del proceso.

  • Nivel 0: Describe un proceso en papel con dibujos CAD
  • Nivel 3: Es un proceso totalmente abierto e integrado con modelos compartidos entre el equipo del proyecto en un sistema compartido para todos los integrantes del equipo que lo conforman.

Durante el 2016, el objetivo fue alcanzar el nivel 2, o sea, crear propios modelos de disciplinas separadas para poder unificarlas y crear flujos de trabajo.

1. Obtener softwares 

Cuando las empresas ven el costo del software como una barrera para BIM, es una clara señal de que no entienden realmente lo que están asumiendo. Su mayor inversión no serán las tecnologías BIM en sí mismas sino el proceso de implementar el cambio en toda la organización. "BIM es trata de un proceso y ahí es donde estará el costo real. En realidad, hay una sola forma de beneficiarse del proceso y es contar con un equipo interno y externo totalmente integrado"

La eliminación de todas las barreras técnicas posibles puede alentar a las personas a enfocarse en el proceso, por ello es necesario desarrollar políticas, procedimientos y procesos estándar, mejorar la infraestructura y negociar acuerdos de licencias para toda la empresa en productos clave de diseño, eso hará que la tecnología esté muy disponible para las personas, pero a un costo razonable para poder aprovecharla. Si resuelves lo básico, facilitas a las personas a hacer la transición.

Sin embargo, existen alternativas, formas de reducir el costo. Varios productos gratuitos permiten a los usuarios ver y probar los modelos, lo que puede ser útil para los miembros del equipo del proyecto que no están realmente diseñando, o para tener una idea inicial del software.

2. Entender tu empresa

La pregunta más común, pero a veces pasada por alto, es cómo funciona exactamente una empresa en primer lugar si utiliza BIM. Debemos destacar una vez más que BIM trata de tomar herramientas y flujos de trabajo para que las personas usen y cambien a una forma de trabajo más transparente y colaborativa. Necesitas determinar una mayor cantidad de información y los procesos que se desean alcanzar, pero primero y lo más fundamental de todo, es comprender la situación actual en su oficina o empresa.

3. No se lo dejes todo al jefe

Estamos de acuerdo en que una oportunidad de trabajar con metodología BIM, solo se arraigará en una organización si se dirige desde lo más alto. Para empezar un cambio, hace falta un jefe que lidere de manera correcta y aporte al equipo una visión amplia y un carácter y determinación que elimine las incertidumbres. Por ello, una buena actitud por parte de los gerentes o altos cargos, harán que el equipo se sume al cambio.

4. Haga un plan

Una vez que tienes el liderazgo y vas encaminado hacia la senda BIM, necesitas una estrategia para hacer realidad su visión. Afortunadamente, visionarios de esta tecnología se juntaron hace unos años para formar distintos subcomités de entusiastas por el BIM en oficinas de todo el mundo. Se reunió a personas de todo el mundo, y estuvieron reunidas durante una semana y al final revisaron todas las cuestiones culturales y tecnológicas que necesitaban abordar. Para cada uno se pregunto: "¿Es importante, es una prioridad, y si as así, qué hay que hacer al respecto?"

Una de las decisiones más importantes, fue crear una comisión y realizar una jerarquía, que va desde un director sénior con responsabilidad global por la implementación de BIM líder en todo el grupo y a su vez ir delegando en otros miembros del equipo las tareas correspondientes a otras disciplinas.